6 ene 2008

otro año más


Desde hace un tiempo he cogido por costumbre dejar sin terminar los pocos libros que leo. Al acercarme a las últimas páginas empieza a flojear el libro en mi mano -o mi mano afloja su presión sobre el libro- lo dejo caer al suelo y lo abandono. Si el libro no me gusta entonces supone un alivio, y si, por el contrario, es de mi agrado, encuentro cierto placer, que se puede considerar, por un lado, como una pequeña venganza personal hacia el autor (más si éste es joven), y, por otro, como claro reconocimiento de que no le he dado carpetazo y todavía puedo volver a él.

mis eternos problemas con el tiempo y las relaciones. Nada tiene un final, todo es un fluir constante que, en su continuidad, paradójicamente nos permita retomar el camino de vuelta.

de cosas como las que acabo de decir se pueden rellenar páginas hasta componer un libro. Hay autores que escriben así. Diseccionando tonterías, o lo que es lo mismo, cogiéndoles bien el tono...

feliz año y buenos reyes!!

(gracias, manuel, por el regalo del eléctrico condenado a no salirse de la vía)

8 comentarios:

ybris dijo...

Pues cuidado que eres rara. Yo no puedo dejar de acabar un libro, sobre todo cuando paso de la mitad.

Ánimo y a pasarlo bien.

Besos

Carmen dijo...

en serio thirthe??

yo que me leo hasta la fecha de impresión que viene en la última hoja!!

pocos libros no termino. Los que me gustan menos los leo más rápido, los que me apasionan los dosifico, los saboreo, para que no se acaben...

:)) un besazo guapísima

thirthe dijo...

un poco exagero, sí, y más cuando pienso que soy incapaz de hacer dos cosas de la misma manera...:-)tal vez alguno acabe...pero la tendencia es a abandonarlo deliberadamente.

soy un poco rara, eso seguro:-))

besos

manuel_h dijo...

lo de no terminar libros también se está haciendo vicio en mí, pero no llego al extremo de dejar inconclusos los libros que me gustan. Sigo siendo de los que se apenan porque se acaben.

besoss
y gracias

Enrique Ortiz dijo...

yo soy muy tonto: tengo que terminar los libros, y, claro, hay libros que no sé por qué termino. Desde siempre me he propuesto dejar un libro en cuanto deje de gustarme; todavía no lo he conseguido, pero ahí ando. Un beso, Thirthe.

thirthe dijo...

ooooooooh...tal vez lo mío sea tan sólo vagancia disfrazada:-)))

Anónimo dijo...

Una vez alguien dijo que cuando un libro te aburra debes dejarlo sin remordimientos pues o el libro está muy por encima de tus posibilidades o tú estás muy por encima de las del autor del libro. Creo que en tu caso es la segunda posibilidad.
Que tengas un fructífero y agradable 2008!!!.

thirthe dijo...

quérote, antón:-)))